Cómo evitar la indeseable humedad por filtración en muros y fachadas
El agua es imprescindible para la vida, de eso no hay duda. Pero como pasa con casi todo, necesitamos un equilibrio. Si es escasa o demasiado abundante, tenemos un problema y si la encontramos en forma de humedad, pues también.
Hasta aquí todos de acuerdo.
Pero es que, además, el agua siempre encuentra el camino de salida, porque no hay resquicio, ni junta, que se le resista.
Las juntas son el punto conflictivo en cualquier construcción, porque si no se colocan correctamente, es como atarse mal el primer botón de la camisa, vamos que o te das cuenta y lo corriges, o el muro se llena de manchas de humedad.
Es lo que suele ocurrir con el tiempo en los muros o fachadas de nuestras casas. La lluvia cae sobre el muro. Éste, está protegido por unas albardillas, que se colocan unas junto a otras separadas por una junta de dilatación correctamente sellada.
Este es el procedimiento normal y correcto. El problema es que, con el paso del tiempo, el sellado envejece y se cuartea dejando de hacer su función. Termina por filtrarse el agua de lluvia dentro del muro, creando manchas y humedades problemáticas. Como el botón en el ojal equivocado.
Para que esto no ocurra, te cuento que solución hemos desarrollado.
Una solución sencilla, práctica y duradera.
Se trata de la junta estanca J-MAX*, la revolucionaria solución para las humedades que se generan en los encuentros entre las albardillas y los vierteaguas.
¿Qué conseguimos con la Junta J-max?
Pues muy sencillo, conseguimos evacuar hacia el exterior el agua de lluvia filtrada entre las juntas de dilatación. Vamos, que es como si colocamos un pequeño canal de drenaje entre las piezas, que además sobresale del paramento, con lo que consigue recoger y evacuar toda el agua de lluvia. Así se evita que aparezcan los chorretones y manchas de agua. En pocas palabras: conseguimos una junta estanca.
La J-Max, está fabricada en PVC rígido. Al colocarse entre las piezas, queda embutida en el mortero de agarre, y junto con las albardillas y vierteaguas entre las que se haya colocado, consiguen una acabado impermeable y duradero sin necesidad de sellado.
¿Cuáles son sus ventajas?
- Asegura la estanqueidad de las juntas entre albardillas y vierteaguas
- Evita la aparición de manchas en la fachada
- No se deteriora con el tiempo, por la naturaleza de su material
- Se instala muy fácilmente
- No necesita sellado
- Y su longitud se adapta a todos los anchos de muro
Si tú también buscas una solución para evitar humedades en tus muros y fachadas, contáctanos y te ayudamos.
(*) Patente pendiente de concesión.