Rehabilitar y mantener la estética de un edificio de los años 30.
La nostalgia, o ese anhelo de que el tiempo pasado fue mejor.
La sufrimos y al mismo tiempo, nos reconforta recordar momentos, lugares y personas especiales de nuestro pasado.
Algunos edificios también tienen ese poder de evocar la imaginación al mirarlos, y pensar ¿cómo viviría la gente en la época de su construcción? O a sentirte nostálgico por los momentos vividos en ellos.
Algunos de estos edificios son de gran valor, histórico o arquitectónico, y todo profesional del sector de la rehabilitación sabe que hay que mantenerlos.
En estos casos la petición más común suele ser, mejorar las características técnicas manteniendo la estética de cada época.
Este proyecto, es un ejemplo.
Se trata de un edificio histórico de la época de la 2ª república, que además sufrió los envites del frente de Madrid.
Su fachada contaba con prefabricados de aquellos años, de buena calidad. Pero con el paso del tiempo y todo lo vivido, el edificio necesitaba una rehabilitación.
Cornisa especial para mantener el carisma del edificio
El arquitecto del proyecto, Javier Contreras, tenía claro que había que mantener la estética y el carisma singular del edificio y lo que buscaba era un prefabricado para la cornisa que pudiera reproducir el original. Además, tenía que ser una pieza ligera, sin demasiado peso.
Una cornisa prefabricada en hormigón polímero y diseñada especialmente para la obra fue la solución final.
¿Por qué?
Nuestro material, tiene dos características perfectas para este tipo de proyectos:
1.Ligereza. Gracias a sus propiedades mecánicas, permite realizar piezas con perfil más fino y de menores dimensiones. Se crean piezas menos pesadas que con otros materiales.
2.Moldeabilidad. Se pueden crear formas y moldes ya existentes y recrearlas, ya que el material se adapta con facilidad. Se replica la pieza que hay que sustituir.
En total, se han suministrado unas 600 cornisas especiales, diseñadas para este proyecto en concreto.